martes, 26 de julio de 2016

Despedidas


Despedidas incompletas.
Que te dejan con ganas,
con ganas de más.

Pero sí, 
sí existe esa mirada.






Amor, a pesar de todo...








Siempre...







LdC*



sábado, 23 de julio de 2016



Se enamoraron.

Aquellas noches  interminables prometían quedarse para siempre en sus pieles; el surco que dejaron fue tan grande que resultó imposible que no quedara marca.

Cada vez que sentían la presencia del otro se estremecían como si una pluma estuviera rozando cada parte de sus cuerpos.

Una sola palabra lograba que olvidaran el mundo que giraba en torno a cada uno de ellos. Podían sumergirse el uno en el otro incluso a kilómetros de distancia, porque cuando estaban "juntos" no tenían necesidad de nada más.

No sabían deshacerse el uno del otro. No querían. 

Sus hilos siempre estarían unidos. 

Sus vidas, también.





Siempre...





LdC*

domingo, 17 de julio de 2016

Ella


Se sentía sola.

Le daba la sensación de que todo y todos a su alrededor obviaban su existencia. Creía que sus sentimientos le eran arrancados, que todo lo que brotaba de sus labios era escuchado en vano, que sus palabras se pronunciaban en balde.

Olvidó vivir por y para ella. Y es que siempre le encantó ayudar a los demás. En realidad se sentía viva al hacerlo. Lo hizo hasta tan punto que se olvidó de su propia vida.

Cuando, un día, sintió la sangre correr por sus venas, cuando el cosquilleo acariciaba su cuerpo, le invadió la culpabilidad.

Siempre se repetía a sí misma, "¿por qué sentirse culpable por algo que deseo?".

Pero ella siempre pensaba en la moral, en el bien y el mal. Su conciencia no era capaz de perdonarle.

Vive torturándose. Viviendo una vida que no sabe si es la que desea. Sabe que debería dejarse llevar, ser capaz de descubrir todo lo que puede florecer de su interior sin miedo, sin barreras.

Algún día tratará de caminar de la mano de alguien para siempre y sin dudas. Aunque ese alguien no esté ahí para ella.

Algún día...








Siempre...






LdC*

miércoles, 13 de julio de 2016

lunes, 4 de julio de 2016

Mi rutina preferida


Y sin querer (o queriendo) formas parte de mi rutina diaria.

Cada despertar y cada anochecer. Cada momento en el que me quedo embelesada "delante" de ti. Diciendo de todo pero sin saber por donde empezar. Muriéndome de ganas. Volviéndome loca a cada instante...

Y una vez más dices que estás agotado, que no puedes más. 

Y otra vez me maldigo por ser tan cobarde.

Eres mi rutina preferida. Esa que me hace perder los papeles. Esa que me hace enloquecer.











Siempre...







LdC*